29/7/10




DOBLE INFARTO


Mi padre escribía gruesos volúmenes de auto ayuda que se amontonaban en su escritorio. Mi madre, libros interminables de recetas de cocina que formaban una pila sobre su mesa de trabajo. Los libros eran una muralla infranqueable entre ellos y yo. Cada vez que me llamaban para comentar mis notas o comunicarme dónde iría de campamento ese verano, mis ojos apenas asomaban por encima de las torres de sus enciclopedias. Ellos se dedicaban a lo suyo, mientras yo hacía mis pinitos con la escritura. Todo iba bien hasta que la tía Clotilde nos hizo una visita. “¿Y tú qué quieres ser de mayor?”, me preguntó con una sonrisa manchada de carmín, la muy bruja. “Yo, microrrelatista”, dije sin un asomo de duda”.

12 comentarios:

Jesus Esnaola dijo...

Como en una ciudad extraña, rodeada de rascacielos, la pobre. No sé si habrás visto "Coraline" una peli de animación de estética burtoniana, basada en una novelita de Neil Gaiman. Me la has traído a la cabeza, y eso con lo que me gustan Burton y Gaiman, es un verdadero halago.

Por cierto, te he visto seleccionada con un micro estupendo en los microrrelatos de abogados. Mucha suerte, nos veremos en los juzgados!

Un abrazo.

Víctor dijo...

Pues hay que hacer caso a los desoa infantiles, o los arrastraremos siempre, Lola.

Un saludo.

Víctor dijo...
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
Maite dijo...

Muy buena decisión Lola, no podíamos perdernos una microrrelatista tan buena como tú.

Por cierto, enhorabuena por tu selección en los micros de abogados.

Un abrazo.

Lola Sanabria dijo...

No he visto "Coraline", pero en cuanto pueda le echaré un vistazo. Gracias por informarme.

Yo también te he visto seleccionado en lo de los abogados con un excelente micro. Suerte también para ti. Y a ver si este año publican el librito como el pasado e incluyen alguno de ambos.

Hola Víctor, ojo avizor. Sí, hay que dejar hacer a los niños y sobre todo tener el corazón fuerte, por si los disgustos.


Besos volados, a repartir.

Lola Sanabria dijo...

Gracias Maite. Ya he visto que también estabas seleccionada en el concurso de abogados. Suerte.

Besos, mil.

Anónimo dijo...

Me gusta Lola. Como dice Jesus te imagino pequeña, pequeña entre edificios de libros y adultos esperpénticos...

Qué bueno que andeis en lo de los abogados, ahora mismo leo. El de Lola ya lo había visto.

bechos

R.A.

Lola Sanabria dijo...

Gracias, R.A. Está el de Jesus y el de Maite. Los dos muy buenos.

Abrazos flojitos por la calor.

Agustín Martínez dijo...

Hola Lola.Primero, darte las gracias por tu comentario. Luego, decirte que es cierto, coincidimos en "El Puente" y me gustaría explicarte mi ausencia. En esas fechas operaron a mi mujer de un quiste. Entonces, aún no sabíamos el alcance ni la gravedad, por eso no pude estar allí. Así se lo hice saber a la organización, ahora tú también lo sabes. Al final, no fue nada y todo quedó en un susto. No obstante, te reitero mis disculpas. Un saludo.

Lola Sanabria dijo...

Hola Agustín, encantada de hablar contigo, aunque sea virtualmente. Me alegro de que se quedara en un susto, y aunque no hubiera sido por ese motivo, no tienes que disculparte ante mí. Además que yo entendí que vivías lejos (coincidimos en más concursos, el primero de Relatos en Cadena, abogados y alguno más, y te sigo) y que el premio no te daba ni para gastos de viaje, así que era más que justificado no asistir. Gracias a ti. Escuché el último programa de Relatos en Cadena y fuiste un buen compañero de viaje cuando te acordaste de ¿un concursante, una concursante que envió ciento y pico microrrelatos y no estaba entre los finalistas? Muchas gracias. Yo me despedí de ese concurso por la puerta chica, tú por la grande, bien merecido lo tenías. Espero seguir encontrándome contigo.

Abrazos.

Anónimo dijo...

Hola Lola.
Gracias por invitarme a tu blog, que con solo un primer vistazo me ha gustado mucho, entiendo que no puedas tener tiempo para esto, escribir y seguir a la página de los cuentos, a mi casi que me pasa algo parecido.
Ya con calma te seguiré leyendo poco a poco.

Así que desde pequeña ya lo tenías claro. Gracias que fuiste fiel a ese sueño, de esa manera hemos podido nosotros disfrutar de tus microrrelatos.

Un fuerte abrazo.

Lola Sanabria dijo...

Gracias, Neli, por pasarte por aquí y dejar tu comentario. Nos seguiremos leyendo.

Abrazos.