20/8/10

Relato leído en "LA VENTANA DE VERANO" de la Cadena Ser.

TEMA: El amigo.
Autora: Lola Sanabria.







(Fotografía de Daniel Meyer)





PRIORIDADES.
Quedamos en La Corredera al anochecer. Necesitaba hablar con Gonzalo. Él dijo que también, por teléfono. Llegué cuando el cielo cambiaba al azulón y, junto a la media luna, brotaban los primeros puntos luminosos. Nada más sentarnos a la mesa, me contó que Elena lo había echado de casa, así, por las buenas, sin más aviso que el silencio profundo de los últimos tiempos. Ignoró a la camarera. Tuve que pedir yo: salmorejo y cazón adobado. Y él siguió lamentándose de su soledad, en el cuarto de una pensión de mala muerte. No me dejaba meter baza. Me removí en la silla. Distraje mi atención en la paloma que picoteaba una patata. Entonces una serpiente de dolor barrió el suelo, subió y me golpeó de lleno en el pecho. Miré a Gonzalo. Sollozaba. Se me antojó un Boabdil con barba de días y la camisa arrugada. Puse mi mano derecha sobre su antebrazo y fui desgranando palabras de consuelo, de esperanza. A mí acababan de despedirme del trabajo, pero tenía a María Luisa.


6 comentarios:

Jesus Esnaola dijo...

Qué buen micro, Lola, qué fácil verse reflejado, cuántas veces habremos estado todos en los dos papeles, y qué bien contado.
Si me permites le cambiaré el nombre al programa: La ventana de Lola, al menos en lo que a micros se refiere.

Enhorabuena de nuevo, la de veces que habré dicho esto últimamente, y un abrazo muy grande.

Te he visto también seleccionada en los abogados; vaya racha que llevas. Yo he mandado uno pero con las palabras tan feas que obligaban no sé si les gustará.

Juan Leante dijo...

Es un placer felicitarte de nuevo y tener el privilegio de colgar estos últimos relatos. Me siento muy felíz cada vez que te escucho en la SER en boca ajena.
Aunque este último no sea de mis favoritos, los gustos son así, creo que tiene ese punto de lo cotidiano por el cual casi todos hemos pasado y que tu sabes contar de forma magistral.
Enhorabuena. Un besazo.

Anónimo dijo...

Sí, lo mismo lo cotidiano y realista que lo surrealista que lo extraño. La Lola se atreve con todo y sabe cómo hacerlo.

Besos


R.A.

Maat dijo...

Un amigo es el que está ahí en los peores momentos...

Me gusta tu blog :)

Un saludo

Lola Sanabria dijo...

De nuevo gracias, a ti Jesus, que siendo tan bueno en esto de la escritura eres además generoso al darme algo de tu tiempo para comentar. A Juan, incondicional compañero que cuando dice me gusta, lo dice de corazón, a R.A.que nunca me olvida, a Matt de quien me gusta que le guste mi blog...
A todos y cada uno de los que se pasan por aquí, puñado de besos.

Nenúfar dijo...

Lola, puesto que este es el relato que te han publicado, prefiero dejarte aquí mi comentario.

Brindar al amigo dolorido el aliento que nosotros mismos precisamos (sin que se entere, si quiera, de nuestro dolor), considero que es una muestra de buena amistad. Eso es lo que yo he apreciado en este texto.

Ver publicados tus relatos debe de ser muy gratificante. Que lo disfrutes, Lola.

Un abrazo.