4/2/15

X PREMIO INTERNACIONAL DE CUENTOS ESCRITOS POR PERSONAS CON DISCAPACIDAD, FUNDACIÓN ANADE





Esta mañana he tenido el placer de asistir a la entrega del X  Premio Internacional de Cuentos escritos por personas con discapacidad que organiza todos los años la Fundación Anade. Un acto emotivo donde los protagonistas han sido los autores de los relatos.
Es un orgullo para mí que una de mis chicas del Centro Ocupacional Ángel de la Guarda, haya ganado el segundo premio, y que otros tres relatos estén editados en el libro.

2º PREMIO: INVIERNO Y PRIMAVERA

Invierno no quería retirarse porque estaba enamorado de Primavera.
     El sol, enfurecido, le dijo a Invierno que tenía que irse porque hacía mucho frío y debía dejar paso a Primavera. “No permites que las plantas florezcan”.

“Estoy enamorado de Primavera y no quiero marcharme”, se justificó Invierno.

     “Si de verdad estás enamorado de mí, debes irte”, le dijo Primavera.

Pero Invierno, muy enfadado, trajo el viento y la nieve y Primavera se tuvo que refugiar detrás del sol.

     Las personas estaban tristes y preocupadas porque ni florecían las plantas, ni maduraban las frutas en los árboles.

    Entonces Primavera, para que Invierno la dejara entrar, lo engañó diciéndole que ella también estaba enamorada de él, y le propuso un trato: que hubiera lluvia y también sol. Un poco de las dos cosas. Así podrían estar cerca.

   Lo hicieron y después de pasar un tiempo juntos, Primavera acabó enamorándose de Invierno.

     Tuvieron muchos hijos que fueron las flores y los frutos.


Julia Pérez Carrión




LAS FLORES DE MARCO




Con una nube, Marcos se hizo un columpio para montarse. Llegaba con los pies al suelo y cogía impulso. Cuando estaba arriba, soltaba las manos y cortaba flores de azahar de los naranjos para llevarlos al Sol. Dejaba el columpio y cogía una bicicleta que subía y subía con la pala de una excavadora. Cuando estaba más alto, se subía a un avión. Ya casi llegaba. En esto, apareció Supermán, lo agarró de los brazos y juntos llegaron al Sol. Marcos dejó las flores allí.  Luego volvió a su pueblo donde lo esperaba su madre en su casa con la comida.

  
Carmen Salso Morales


 

EL TRABAJO

La camarera iba con la bandeja llena cuando tropezó, se le cayó un vaso de cristal al suelo y se rompió en pedazos. Parecían espejos donde se reflejaba la luz del sol. Al mirarlos durante mucho tiempo, se quemó un ojo con el reflejo. Se puso un parche de color azul y aunque sólo veía con un ojo pudo seguir haciendo su trabajo de camarera.


 

Carmen Arribas Ortuño


 


RATÓN

Sobre la mesa y en el suelo había migas de pan. El ratón vino y se las comió todas.
     Los pájaros que volaban con viento del aire quisieron comerse las migas, pero como no había, se fueron a por un bizcocho del bosque. El bizcocho se le había caído a la madre de Caperucita. Lo llevaba en la cesta para su casa y cuando se dio cuenta de que se había quedado sin él, se puso triste.
     Pero el viento del aire le trajo lechugas. Hizo una ensalada sólo para ella y se la comió enterita.

Álvaro Alcaraz Fernández



9 comentarios:

  1. Una preciosa metáfora sobre el amor y sus tiempos la tuya, Julia. Enhorabuena por un premio tan merecido.
    Carmen,Álvaro y Carmen,unas historias llenas de imaginación y originalidad.
    Gracias por compartirlas con nosotr@s.

    ResponderEliminar
  2. Un trabajo el tuyo, Lola, para hacerte sentir plena de satisfacción por "...la obra bien hecha"
    un abrazo

    ResponderEliminar
  3. Gracias, querida Cora.

    Haré partícipe a los chicos de tus palabras.

    Un abrazo como de aquí a Lima.

    ResponderEliminar

  4. Lola, me impresiona la capacidad de estas chicas y chicos.

    Estos cuentecitos, que me parecen ideales para ser contados a los pequeños antes de dormir, me han balanceado entre la ternura y la sonrisa. Además, coincido con Cora en la imaginación y originalidad de estas historias.

    Admirable y gratificante tu labor, Lola. Os felicito a todos: profesora y alumnos/as (ganen o no premios) porque el hecho de escribir supone mucho trabajo y es muy meritorio.

    Abrazos.

    ResponderEliminar
  5. Hace años se publicó un libro con relatos de los chicos del Magerit. Editaron mil y se quedaron cortos porque pedían más de los CADP para poder leérselos a los usuarios.

    Mil gracias, Nenúfar, por tus felicitaciones, y mil besos.

    ResponderEliminar
  6. No se que hice con el primer comentario en el que daba mi enhorabuena a todos los participantes y a aquellas personas que como tú, creéis firmemente en la escritura como un medio para sacar lo mejor de quienes tienen un camino lleno de dificultades.
    Felicidades y besos.

    ResponderEliminar
  7. Por Internet circula mucho ladrón de comentarios, Juan. O meigas, vete tú a saber.

    Mil gracias por tu enhorabuena, que transmitiré a los chicos. Y mil gracias por tus elogios.

    Un abrazo descomunal y calentito.

    ResponderEliminar
  8. Jajajaja, qué buenos! Cómo me he reído con esos remates finales. Esa frescura es difícil de imprimirla aunque uno se empeñe a veces. Me encantan. Qué de tiempo!
    Un abrazo, Lola.

    ResponderEliminar
  9. Gracias a todos los que habéis comentado, de parte de Julia.

    Un abrazo largo, Miguelángel.

    ResponderEliminar