RESPIRO
No es porque me horrorice la idea de darle muerte. Su vida no vale nada. Tampoco me detiene la imagen repugnante de su abdomen abierto. Sería sólo un amasijo que desaparecería con jabón y agua. Pero este sol puro que entra hoy por la ventana, cosquillea y adormece. Y yo solo quiero dejarme llevar por el calor tibio. Balancearme, adelante y atrás en la mecedora desportillada y raída de una abuela. No levantaré la mano derecha para aplastar la mosca parada en la izquierda. Tal vez pueda dormir un rato, a pesar del ruido de las ametralladoras en la calle.
Como la mosca me siento muchos días de un tiempo a esta parte, suerte de los "respiros", je je.
ResponderEliminarAbrazos desde el alambre.
Lola, que buen contrapunto la de esa abuela, entre que sí y que no de aplastar a una mosca, mientras permanece casi impasible a la guerra que la rodea. Es una metáfora, sin duda, de la sociedad en la que vivimos.
ResponderEliminar¡Buena indignación!
Abrazos con fuerza.
Hemos pillado al poderoso en el descanso del guerrero. Feliz micro sobre la prepotencia, Lola.
ResponderEliminarFeliz micro sobre el descanso del guerrero prepotente, Lola.
ResponderEliminaro el descanso del guerrrero prepotente
ResponderEliminarhemos coincidido en el asunto de las guerras, esas que ya ni siquiera conmueven las entrañas de nadie.
ResponderEliminarEse calorcito que entra por la ventana...
Besos a miles
Ok, que respire, que descanse. Pero que sepa que la necesitamos. Los necesitamos a todos.
ResponderEliminarGracias, Ana. Seguimos en la alambrada.
ResponderEliminarNecesitamos, Luisa, algo más que un respiro.
Abrazos a pares.
La pesadilla está al otro lado del sueño.
ResponderEliminarUn abrazo.
Hoy es un día para recordar que hace unos pocos años, si no matamos a la mosca, al menos la hicimos volar un rato. Pero ella no se cansa y vuelve una y otra vez.
ResponderEliminarBesos.
Un respiro es necesario y fundamental para seguir adelante. Me ha gustado. Felicidades.
ResponderEliminarBesicos muchos.
Ele, en cuanto pueda me paso a leer la coincidencia.
ResponderEliminarMoscas que estamos expuestas a las palmadas de los poderosos, Miguel.
Una sociedad en la que una vida, a veces, no vale nada, Nicolás.
Una excelente manera de verlo, Carlos.
Ya lo creo que voló, y bien alto, Juan.
Respirar para seguir sembrando paz o guerra, Casa.
Abrazos desde la alambrada.
Una imagen muy evocadora, Lola, la mosca, la mecedora, el sonido de ametralladoras. A ver cuándo volvemos a escuchar a los pájaros, y que ellos se coman a las moscas, el ecosistema funcionando otra vez, ¿te imaginas?
ResponderEliminarBesazos triples
Sí, me imagino, ahora toca que llegue a ser realidad, Anita.
ResponderEliminarAbrazos desde la alambrada.
Una pena, el sonoro palmetazo de la muerte en una mano izquierda es el contrapunto sonoro ideal para esa melodía de ametralladoras. Tú misma.
ResponderEliminarFrancamente bueno, como es habitual en ti.
Abrazos, siempre
Mil gracias, Amando.
ResponderEliminarAbrazos desde la alambrada
Sabes qué pienso ante este ser que se balancea, dormita y piensa sosegadamente al atardecer de ese escenario de guerra?
ResponderEliminarQue el ser humano es capaz de lo mejor y de lo más obsceno, sobre todo en circunstancias extremas.
No tengo mi día más positivo.
Yo también lo creo así, querida Cora.
ResponderEliminarLluvia de besos.