ENGAÑO
“La carne rebozada fría no vale nada, y el helado se está deshaciendo”, afirmó, con cara de asco, la noche del veintiuno de julio. Pero todos sabían que tenía el estómago en un puño. Excusas. Como cuando dijo que con la inseguridad que había en las calles, ¿para qué salir? En los últimos meses había tejido una red de mentiras donde caer sin hacerse daño. Se levantó despacio y, mientras el funcionario retiraba la bandeja, miró a través de la ventana y vio, bajo la luz de la luna, el cadalso levantado en el patio. “Hace frío, ahí fuera”, dijo con un estremecimiento.
SUTILEZAS
La carne rebozada fría no vale nada porque nadie hay a la mesa. El vino sin dedos que lo descorchen, se calienta en la cubitera. El sol, sin la sombra del castaño, es pura insolación. La luna sin enamorados, una roca muerta. La Tierra sin niños, una pelota que gira. Manos que no arropan, no acarician, no dan. Mano sobre mano. Mis arterias, túneles de sangre congelada. Nada me retiene aquí. A no ser por ese aleteo de colores en el cristal de mi ventana.
Sacas petróleo de debajo de las piedras y te superas cuando menos me lo espero. Me gustan los dos, cosa bastante difícil a mi entender, cada uno brillante en el tema que se ocupa.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Besazos.
Gracias mi chico. Me encanta que te gusten.
ResponderEliminarUn achuchón muy fuerte.
Coincido con Juan aunque, por motivos que desconozco, me quedo con Sutilezas, hay fondo ahí.
ResponderEliminarBechos
R.A.
R.A. Tú sí que tienes fondo, y muy bueno. Muchas gracias, guapa.
ResponderEliminarPuñado de besos.
Me gustaron los dos aunque me quedo con el primero, cuestión de gustos. Te he visto comentando al indio y a Víctor, no sabía que tenías blog. Con tu permiso me apunto.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Jesús. Un placer tenerte por aquí.
ResponderEliminarAbrazos.
Más allá de que me guste más uno que otro, son muy buenos intentos. No hubo suerte en el concurso. Pero sí la tenemos nosotros por leerlos.
ResponderEliminarUn saludo indio
Muchas gracias, Indio. Es estupendo tener lectores como tú.
ResponderEliminarSaludos cordobeses.